Según la Asociación de Fibromialgia (AFIBROM), este padecimiento afecta a un 2,45% de la población mundial y más del 90% son mujeres, entre los 30 y 55 años.
Diagnóstico clínico.
La fibromialgia es una enfermedad crónica, caracterizada principalmente por dolor constante y generalizado, fundamentalmente en tendones y articulaciones, y localizado en la región cervical, lumbar, en las articulaciones de cadera, codo y rodilla y también en el pecho.
Además, la fibromialgia puede producir otros síntomas, principalmente fatiga crónica, problemas de sueño, memoria y estado de ánimo. De cualquier forma, las manifestaciones clínicas pueden variar según el paciente.
Hasta el año de 1992 la enfermedad fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), antes se creía que era un padecimiento psiquiátrico, por la dificultad de identificar el origen de las molestias que presenta.
Origen y diagnóstico.
La causa de esta enfermedad es desconocida, pero existen desencadenantes, tales como la depresión, la ansiedad, el estrés, o alguna otra enfermedad.Uno de los principales desafíos en la fibromialgia es el diagnóstico. Aunque actualmente no existe una prueba para confirmar la enfermedad, para su diagnóstico se realizan protocolos de pruebas diagnósticas que permiten ir descartando otras alteraciones y/o enfermedades.
En esta etapa es importante que el médico realice un examen físico completo, y que al tocar los puntos críticos de dolor se desencadene.
Lo importante es que dar con un diagnóstico certero pronto para poner en tratamiento al paciente lo antes posible pues de no tratar el dolor, este llega a ser incapacitante para la persona en su día a día.
Fuente @semdor (tomado de @laprensagrafica)
